martes, 31 de mayo de 2011

MODULO 1. CONCEPTO PRIMEROS AUXILIOS

PRIMEROS AUXILIOS




Los primeros auxilios, son medidas terapéuticas urgentes que se aplican a las víctimas de accidentes o enfermedades repentinas hasta disponer de tratamiento especializado. El propósito de los primeros auxilios es aliviar el dolor y la ansiedad del herido o enfermo y evitar el agravamiento de su estado. En casos extremos son necesarios para evitar la muerte hasta que se consigue asistencia médica.

2. EN PRINCIPIOS DE ACTUACION RIMEROS AUXILIOS PRINCIPIOS BÁSICOS.


Todo socorrista en sus actuaciones debe conocer y aplicar siempre en este orden los siguientes principios básicos:
1º. PROTEGER: en primer lugar, a él mismo y después a la víctima. Podemos evitar nuevos accidentes, si señalizamos el lugar del accidente. SÓLO si hay peligro para el accidentado se le desplazará, manteniendo recto el eje cabeza-cuello-tronco.
2º. AVISAR: es decir dar el SOS, indicando: el número y estado aparente de los heridos, si existen factores que pueden agravar el accidente (caídas de postes eléctricos) y el lugar exacto dónde se ha producido el accidente. Saber que de la información que nosotros demos, va a depender tanto la cantidad como la calidad de medios humanos y materiales, que allí nos lleguen.
3º. SOCORRER: Esta es la finalidad principal de los primeros auxilios, pero para hacerlo correctamente previamente hace falta realizar la evaluación del herido.

3. TERMINOLOGIA CLINICA


SIGNOS Y SÍNTOMAS

SÍNTOMA: Manifestación de una alteración orgánica o funcional apreciable solamente por el paciente. (P.ej., el dolor).
SIGNO: Manifestación de una alteración orgánica o funcional apreciable tanto por el paciente como por un observador. (P.ej., convulsiones, deformación de un miembro).
 Esto es, los síntomas son subjetivos, mientras los signos son objetivos. Ambos nos van a proporcionar información sobre el estado del herido. Para conocer los síntomas es necesario recurrir al interrogatorio, mientras que para los signos usaremos la exploración, esto es, inspección y palpación. La inspección permite apreciar mediante la observación el estado general del herido, el color de su rostro, la deformidad de un miembro fracturado, la importancia de una quemadura, etc. Por la palpación podemos apreciar la frecuencia y regularidad del pulso, el dolor localizado en una contusión, etc. Finalmente, ciertos datos de exploración solamente podremos obtenerlos mediante el empleo de aparatos auxiliares, tales como el termómetro, para medir la temperatura, o el esfigmomanómetro, para la presión arterial.
LA RESPIRACIÓN.
La frecuencia respiratoria normal es de 16 a 20 R.P.M. (se cuenta como una respiración la suma de inspiración y espiración). El aumento de dicha frecuencia, o taquipnea se produce de manera fisiológica tras el ejercicio o la excitación; igualmente, la permanencia en alturas considerables o en grandes profundidades acelera el ritmo respiratorio. La bradipnea, o disminución de la frecuencia respiratoria, se presenta fisiológicamente durante el sueño. Patológicamente lo hace en intoxicaciones por opio, barbitúricos, alcohol, ácido carbónico, ácido cianhídrico; el estado de shock, etc.
La disnea es la dificultad para respirar. Desde el momento en el que la respiración deja de ser un reflejo inconsciente para convertirse en un acto consciente empieza la disnea.
Dado que la respiración normal depende de muchos factores, son muchas también las posibles causas de disnea: la falta de oxígeno en el aire, la falta o escasez de hemoglobina en la sangre, la obstrucción de las vías respiratorias, etc.
EL PULSO: MANERA DE APRECIARLO Y DATOS QUE SUMINISTRA.
El pulso es la transmisión a todas las arterias del organismo del impulso cardíaco sistólico, esto es, durante la contracción del corazón. Por ello, puede ser apreciado en cualquier parte del cuerpo en que exista una arteria cerca de la superficie de la piel y, mejor aún, si descansa sobre el plano duro de un hueso.
La arteria más utilizada para valorar el pulso es la radial, localizada en la parte externa de la cara anterior de la muñeca. También puede explorarse en la carótida, a ambos lados de la garganta. Otros puntos utilizados para valorar el pulso son las arterias temporales, sobre las sienes; la femoral, sobre las ingles y la poplítea, en el hueco de la cara posterior de la rodilla.
Por la facilidad de su localización y por su importancia, al informarnos sobre la irrigación sanguínea cerebral, el pulso carotideo es el que debemos valorar en una situación de primeros auxilios. Éste se debe buscar a la altura de las arterias carótidas situadas superficialmente a ambos lados de la línea media del cuello. El auxiliador procederá de la siguiente forma:
Conviene señalar que NO se deben palpar ambas carótidas a la vez, puesto que si se interrumpe o dificulta el paso de sangre al cerebro, puede ponerse en peligro al herido.
Aunque tres son las características del pulso, a saber, frecuencia, ritmo y amplitud; a nosotros nos interesa fundamentalmente la primera. La FRECUENCIA normal del pulso es muy variable en un adulto sano. En reposo suele ser de 60 a 80 pulsaciones por minuto, con variedades de hasta 44 en individuos robustos y entrenados (Miguel Induráin p. Ej.), y de 90 a 100 en sujetos más débiles o nerviosos, así como en los niños.
El aumento de frecuencia se denomina taquicardia: de manera fisiológica se presenta tras el ejercicio, la excitación nerviosa o las comidas abundantes. De forma patológica la fiebre, shock traumático, hemorragias, infarto de miocardio, entre otras causas desencadenan la taquicardia.
El pulso lento se denomina bradicardia, fisiológico durante el sueño y en atletas en reposo. Si es muy lento (inferior a 40 rpm) debe hacernos pensar en una lesión cardiaca (sobre todo si el individuo sufre desvanecimiento o disnea) o cerebral (en los traumatismos craneoencefálicos).
LA PRESIÓN ARTERIAL
La presión arterial, también conocida como tensión arterial, es la presión que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias. Depende de la energía de la actividad del corazón, la elasticidad de las paredes arteriales y el volumen y viscosidad de la sangre.
La presión máxima se produce cerca del final del latido de expulsión del ventrículo izquierdo del corazón, y se llama máxima o sistólica. Esta refleja el volumen de sangre circulante. Su descenso puede deberse a una pérdida de sangre masiva, caso del shock. La presión mínima se produce en la parte final de la diástole ventricular, y se llama presión mínima o diastólica. Va a reflejar el diámetro de las arterias, su descenso se debería a la dilatación de las mismas y viceversa.

4. VALORACION DEL ESTADO DEL ACCIDENTADO: VALORAION PRIMARIA (EL ABC) Y VALORACION SEGUNDARIA


VALORACIÓN PRIMARIA
El proceso de valoración consiste en la recogida de datos sobre el paciente que pueden ser de utilidad para facilitar la correcta actuación del auxiliador. Esta valoración ha de ser sistemática y precisa. Entendemos dos formas complementarias y consecutivas de valoración: la primaria y la secundaria.
En una situación de urgencia, a pesar que la reacción instintiva de cualquier persona es emprender alguna acción, no se ha de caer en este error, pues la valoración primaria requiere pocos minutos y de su realización puede depender la vida del accidentado.
La valoración primaria se inicia con la primera impresión que el auxiliador tiene al ver al herido, que se forma a partir de lo que vemos y oímos, seguida de la evaluación primaria propiamente dicha, que consiste en identificar problemas que amenazan la vida del individuo, resumidos en el ABC:
A.- AIRWAY: Permeabilidad de las vías aéreas, necesaria para que el aire llegue a los pulmones.
B.- BREATHING: Existencia de respiración espontánea.
C.- CIRCULATION: Existencia de latido cardiaco y ausencia de grandes hemorragias.
La alteración de estos tres puntos se da en la parada cardiorespiratoria, que será tratada posteriormente.
VALORACIÓN SECUNDARIA
Sólo después de realizar la valoración primaria y las debidas actuaciones (reanimación cardiopulmonar, apertura de vías, etc.Si las hubo, se realiza la valoración secundaria.
Ésta consiste en la valoración del estado del accidentado de pies a cabeza, tanto por delante, por detrás y por ambos laterales. Se han de buscar:
-fracturas de miembros o de la columna vertebral,
-golpes recibidos en la cabeza, tórax, abdomen y/o espalda que puedan producir hemorragias internas,
-lesiones, contusiones, quemaduras, dolor, etc.
Durante este proceso se interrogará al enfermo, si está consciente, intentando obtener la mayor cantidad de información posible por si dejara de estarlo. Se anotaran, y posteriormente se trasmitirán a los servicios sanitarios, los siguientes datos:
- nombre, apellidos, edad, constantes vitales (pulso y respiración), enfermedades que padezca o haya padecido, medicación que toma habitualmente (anticoagulantes, insulina,..), alergias a algún medicamento, si lleva algún informe médico encima, localización del dolor, hormigueos, "descargas eléctricas", entorpecimiento de las piernas, actuaciones de primeros auxilios realizadas y respuesta del paciente a ellas, SI existe hemorragia la cantidad aproximada y el origen, SI se está realizando la Reanimación Cardio-Pulmonar, tiempo desde la parada y tiempo que se está realizando la maniobra. SI existe intoxicación por fármacos o productos tóxicos, cuándo y qué cantidad, y si hubo vómitos.

5.LEGISLACION EN PRIMEROS AUXILIOS


1.- omision del deber de socorro
2.- omision del deber de denuciar ciertos delitosdelitos.
3.- Denegación de auxilio.
4.- Daños causados por actos imprudentes.

MODULO 2)1. CLASIFICACION DE HERIDAS Y COMO DETENERLAS=

HERIDOS:
La necesidad de clasificar a los heridos de un accidente con múltiples víctimas es un hecho largamente explicado en toda la bibliografía existente sobre el tema. Sin embargo, este acuerdo general, se rompe cuando se trata de determinar el procedimiento para llevarlo a cabo, así como las categorías en que deben ser clasificados los heridos y, otros muchos aspectos relacionados con el tema.
Es la pérdida de continuidad en las partes blandas del cuerpo, como consecuencia de un trauma (golpe, herida, cortadura, raspón, etc).



TIPOS DE HERIDAS:
Heridas abiertas: En este tipo de heridas se observa la separación de los tejidos blandos. Este tipo de herida tiende a infectarse fácilmente.
Heridas cerradas:Son aquellas en las que aparentemente no hay lesión, sin embargo, la hemorragia se acumula debajo de la piel, en cavidades o viceras. Aunque, aparentemente no ha sucedido nada, las lesiones internas pueden ser de gravedad.
Este tipo de lesiones deben ser tratadas por un médico inmediatamente.
Heridas simples :Son heridas que afectan la piel, sin ocasionar daño en órganos importantes como: rasguños, heridas pequeñas, arañazos.
Heridas complicadas :Son heridas extensas y profundas con hemorragia abundante; generalmente hay lesiones en músculos, tendones, nervios, vasos sanguíneos, órganos internos y puede o no existir perforación visceral.

HERIDAS POR EL TIPO DE OBJETO:

Es importante determinar el objeto o la acción que causo la herida, de esta forma será mucho más fácil saber el tipo de atención que requiere el herido.

· Heridas cortantes
Producidas por objetos con extremos filosos como latas, vidrios, cuchillos, que pueden seccionar músculos, tendones y nervios. Los bordes de la herida son limpios y lineales, la cantidad del sangrado depende del lugar y la cantidad de los vasos sanguíneos lesionados.
· Heridas punzantes
Son producidas por objetos puntiagudos, como clavos, agujas, anzuelos o mordeduras de serpientes. La lesión es dolorosa, el sangrado puede ser escaso y el orificio de entrada es poco notorio; es considerada la más peligrosa porque puede ser profunda, haber perforado vísceras y provocar hemorragias internas. Son heridas de fácil infección, ya que la limpieza de la herida se dificulta o no es atendida como debe ser. Una complicación común es el tétanos.
 

 
Luego de realizar la presión directa es muy bueno elevar la extremidad donde se ha producido la herida, con lo cual disminuye el flujo sanguíneo y la hemorragia se cohíbe con mayor facilidad.
Como prevenir la infección de una herida: Éste es el siguiente paso a la detención de la hemorragia. Queremos dejar claro que estamos realizando una descripción para curar heridas de índole leve, si la herida llegase a ser de una magnitud importante no dude en consultar a su médico.

2. HEMORRAGIAS Y COMO DETENERLAS


Las hemorragias son pérdidas de sangre que pueden acontecer interna o externamente. La hemorragia interna se refiere a sangre que gotea desde los vasos sanguíneos hacia el interior del cuerpo; mientras que como hemorragia externa podemos diferenciar dos tipos: por orificio natural del cuerpo (recto, vagina o boca), o externa simplemente (producida por la ruptura de la piel). Resumiendo podríamos decir que una hemorragia es la salida de sangre de los vasos sanguíneos a causa de su ruptura.

COMO DETENERLAS

Si se divisan síntomas de hemorragia externa la primera actitud preventiva que se debe tomar es la de realizar una presión directa sobre la herida. Con una gasa se presiona sobre la herida y se la deja allí cuando se empape en sangre, lo cual facilitará la coagulación.
 Nunca coloque hilo directamente sobre una hemorragia, ya sea interna o externa; envuélvalo en una toalla u otro medio y aplíquelo luego.
Las hemorragias pueden acontecer por lesiones o de forma espontánea. Las hemorragias espontáneas pueden deberse a problemas en el tracto gastrointestinal o urogenital.
Dijimos pues que las hemorragias pueden clasificarse por su naturaleza en: Internas – Externas – Externas por orificios naturales del cuerpo.
Según de donde proceda la hemorragia se las puede clasificar en otros tres subgrupos:
Arteriales:
Sangre de color rojo vivo y brillante
. Flujo intermitente
Mucha presión
Venosas Sangre de color rojo oscuro. Flujo continúo.
Capilares Su flujo se produce a partir de pequeños puntos. Poco flujo.
Los síntomas de hemorragia serán diferentes de acuerdo a la velocidad con que se pierde la sangre, el volumen y la condición previa del paciente (edad, medicamentos que utilizan, enfermedades recurrentes, etc.).